Fabricar muebles artesanales:
¿Por qué la producción artesanal de muebles es mejor que la industrial?
¿Qué diferencias hay?
¿Cómo saber diferenciarla?
Hoy en día estamos muy acostumbrados a comprar las cosas en serie, perfectas e idénticas unas a otras. Se ha viralizado tanto que casi ni nos damos cuenta de ello, y mucho menos valoramos la opción de la artesanía; sino que nuestro ojo se ha acostumbrado tanto a las copias idénticas y a las producciones perfectas que hacen las máquinas, que no ponemos en valor, ni apreciamos las producciones artesanales. De hecho, nos parecen toscas e imperfectas, y exigimos al artesano que no se aprecien las marcas que demuestran que se ha hecho a mano, así de hipócritas y absurdos nos hemos vuelto.
Los muebles de madera auténticos, hechos con maderas macizas por las manos de un artesano requieren de un tiempo de elaboración y en cada pincelada, en cada recodo se nota la mano del fabricante. Eso es lo que hace la pieza única. Un objeto o mueble elaborado a mano, es imposible hacerlo idéntico a otro, por mucho que nos esforcemos, se podrán parecer mucho, pero será imposible que sea igual.
Un hándicap con el que los artesanos luchamos actualmente es que los muebles artesanales no se pueden comprar de un día para otro, necesitan un proceso de elaboración, pintado, secado, etc. La actual sociedad del consumo y las grandes plataformas como Amazon o Ebay que ofrecen envíos express donde puedas recibir el producto el mismo día que lo compras, hacen muy difícil la labor de concienciar sobre un consumo responsable. Y sobre todo hacen difícil, que se valoren aspectos como la artesanía. Sin embargo, un valor añadido que muchos empiezan a apreciar de la artesanía frente a la industrialización, son:
- La personalización: en medidas que se adapten a tu hogar, no tu hogar a las medidas del mueble. La personalización en diseños, únicos y diferentes, donde tú mismo puedes decidir el diseño y plasmar así tus gustos y personalidad en el mueble. Todo ello pone en valor a los productos artesanales, ya que las grandes industrias del mueble, que producen masivamente, no pueden atender este tipo de solicitudes, no atienden a la persona y sus necesidades, sino que atienden a la masa, y quieren convertir al cliente en parte de esa masa.
- La durabilidad: este es otro factor importante y cada vez más apreciado. Ya nuestros abuelos compraban muebles de mayor calidad, hechos para durar. Era una gran inversión, pero sabían que comprabas algo para toda la vida. La sociedad de consumo y la industrialización cambiaron radicalmente ese aspecto, apostando por muebles más baratos, pero poco duraderos. De modo que el cliente que solo se fija en el precio no valora que a la larga es una inversión aún mayor, y como bien decían nuestros abuelos, lo barato sale caro. Los muebles hechos con materiales naturales como la madera maciza y el hierro soldado, son mucho más duraderos en el tiempo. Los muebles artesanos no son baratos ya que no son industrializados, se requiere material de alta calidad y muchas horas de dedicación.
- Calidad: muy relacionado con el aspecto anterior, es la calidad de los materiales que usamos los artesanos frente a los que se usan en la producción industrial. Los artesanos necesitamos materiales de calidad para malearlos y darles forma, no podemos usar materiales que se rompen fácilmente. Sin embargo, en los procesos de industrialización hechos por máquinas lo que se premia es abaratar los costes usando para ello materiales de baja calidad, de ahí los MDF, melaminas, que no son otra cosa que migados de lo que dicen ser maderas y recubiertos de una capa de plástico que imita la madera. O la calidad de las estructuras de hierro, los artesanos solo usamos acero de gran grosor, apto para soldar y lijar, diseñados para muebles robustos y a medida.
- Economía verde y circular: la concienciación sobre el consumo excesivo y sin control y los desechos que generan la mayoría de cosas que consumimos hoy en día, ha generado una tendencia en alza por valorar a aquellas empresas que producen de forma responsable. Consumiendo productos de cercanía, en lugar de productos fabricados en otros países, de baja calidad y gran impacto medioambiental. La tendencia actual a consumir muebles ecológicos, hechos con productos naturales, que no solo contribuyen a cuidar el planeta sino también nuestra salud.
Los procesos de fabricación de un artesano:
La fabricación de un mueble a medida, no es complicada. Lo que se necesita es el boceto del diseño que vamos a seguir. Ese boceto que previamente se acuerda con el cliente, o se estudia para lanzar al mercado en la tienda online, debe ser analizado estructuralmente. Es decir, muchas veces vemos diseños muy innovadores y modernos pero con poca estabilidad, en Metaltienda analizamos las estructuras que van a soportar el muebles para que sean estables, seguras, y sólidas. Intentamos mantener el diseño, pero dando empaque y estabilidad al mueble.
Una vez elegido el diseño y teniendo claras todas las medidas se pasa a la selección de materiales, tipos de maderas de pino, haya, roble, castaño, etc., la que el cliente desee, colores, tamaños del acero, etc.
Y llegados a este punto empezamos a darle forma al mueble, cortamos la madera con la sierra de cinta y la cepillamos las veces que sea necesario para dejarla suave, y con el grosor y tamaño necesario. Igualmente hacemos con el acero, cortamos todas las piezas, de patas, y estructura y pasamos a soldar y lijar las soldaduras para dejarlas lo más pulidas posible.
Una vez tengamos estas partes, pasamos a hacer una prueba de montaje y marcamos donde va a ir cada pieza. Lo siguiente es darle el tratamiento a la madera para endurecerla y protegerla. Y lo mismo al acero, se elimina todo el posible aceite e impurezas que pueda tener de las soldaduras, limpiando toda la grasa, y pasamos a dar una capa de imprimación y dejamos secar 24h mínimo, ya sea la imprimación del metal como los tratamientos de la madera.
Una vez pasado el tiempo, pasamos a la parte del color tanto para el metal como para la madera, o barnizado incoloro para ambos si se desea al natural. Pero es importante aplicarles este tratamiento para proteger ambos materiales de la oxidación y el desgaste del paso del tiempo.
Una vez tengamos todo listo, ensamblamos y probamos el mueble, lo que seria su acabado final. Si pasa los controles de calidad, y está listo, ahora viene una parte muy importante y es su embalaje. Debemos proteger bien todas las esquinas y todo el mueble en general para que durante el transporte no se deteriore, o se estropee por un golpe o caída. Este proceso aunque pueda parecer sencillo es muy delicado.
Como podréis ver la fabricación de un mueble artesanal conlleva muchas ventajas y también mucho trabajo, dedicación y cuidado, todas las partes del proceso son hechas por una persona, no por máquinas por ello lleva su tiempo.